Conocí a un chico que me hizo llorar. Me dijo: "Aléjate de los de mi tipo". Le dije que apreciaba su honestidad y me alejé por un tiempo. Te has marchado tranquilo, no llamas, y ya nada es divertido. Podrías perderte y buscarte para siempre, buscando a la persona que tú nunca serás. Hemos estado tratando de compensar el tiempo para aprender de nuestros errores. Tal vez algún día vamos a encajar de nuevo juntos. Ahora tenemos que seguir el destino, ahora miremos hacia otro lado, encontraremos la fuerza para estar solos. Soy una soñadora pero es difícil dormir cuando tu cabeza está en otro lado. He estado sin descansar porque has desaparecido y eso es todo lo que me hace falta. Esto no puede ser amor si duele tanto así.
Luego de un par de meses estaba llamando a mi número, gritó y me reí por el teléfono y hablamos por horas. Dijo que quería ser músico, yo también; supongo que nunca hubiera funcionado. Pero en estas noches de verano, cuando el clima es el adecuado, lo extraño a mi lado... y cuando el viento sopla desde el oeste de las colinas, en estas noches de abril pienso en él. El chico que sin lugar a dudas me enseñó a amar, me enseñó a confiar y yo no me resistí.
Y nuestro amor era tan fuerte, era tan intenso y éramos jóvenes, y yo era un poco ingenua, pero aún así, ¡de que manera estuve en sus brazos durante mil atardeceres! Era un amor digno de recordar.
No escogí depender de ti, pero podrías venir para quedarte, no veo porqué tengo que vivir esta vida sola si ambos queremos estar juntos.
Agustina.