6/1/15

No te amo como lo hice ayer.

Como cada noche estas aquí, pero hoy se siente diferente a otras veces. Aquellos nervios que sentía cuando te veía, se esfumaron, la emoción por tu presencia se ha perdido. Perdona si miro hacia otro lado, en vez de perderme en tu mirada. Perdona si mis labios no buscan incesantes tus besos. Perdóname mi amor por no poderte abrazar con la misma calidez de antes.
Y tu, no me abraces, que tu calor me da frío, ya no es tu pecho mi refugio. Me canse de esperar que retomaras nuestro camino, me canse de ser invisible ante tus ojos. Me dejaste tantas noches sin tu abrigo, aun sabiendo que sin ti moría. Te fuiste como un desconocido, refugiándote en los brazos de otra persona, dejando mi corazón triste y herido.
Tantos días esperaba verte, y cada vez ponías más y más pretextos. Tu orgullo, tu vanidad, y tu egoísmo, te fueron alejando de mí, de quien te amaba. Hoy vienes por mí, pidiendo perdón, ofreciendo lo que ayer me has negado, jurando que sigues siendo mio, que en ningún lugar te has sentido como en casa, que no te has sentido tan completo como cuando estabas conmigo. Me dices que de haberte marchado estas arrepentido, pero bueno, cuando te vayas, no llegues a pensar que trataré de hacer que te quedes. Y quizá cuando regreses, estaré apagada, para encontrar otro camino. No te amo como lo hice ayer, así que toma tus bolsos del piso y vete, que ya no me perteneces.
Agustina.