1/10/15

Dejaré de ser tuyo.

De nuevo te escribo porque me encuentro solo y porque me apena siempre tener que charlar contigo sin que lo sepas ni me oigas, ni puedas contestarme.
Desde hace mucho acepté que nunca serás para mí y que no te tendré tan cerca como antes, pero ese amor que alguna vez te juré para siempre, no se extingue, no se muere y sangra todos los días.
Desde que te alejaste, cuántos lugares se han tornado vanos y sin sentido, iguales a luces en el día.
Pero te escribo para implorarte… dame una noche, solo una, déjame vivirte una vez más antes de caminar solo.
No sabes lo difícil que fue para mí algún día buscarte, y lo difícil que es ahora perderte. Pero no te pediré que te quedes, más bien te ruego que te marches lejos, aléjate lo más que puedas de mi presencia.
Yo por mi parte cambiaré de perfume y de canción favorita, dejaré de ser yo, para así dejar de ser tuyo.
Si alguna vez nos conocimos, por favor olvídalo, así me ayudarás a borrar tu huella y a reparar el daño que yo, por ti, me hice a mí mismo.
Agustina.