Te odio, porque haberte amado una vez, me trae dolor.

Me molestan tus actitudes, tu hipocresía y tu inmadurez. Tu falta de cariño, tus enojos, tus torpezas y tus actos intolerantes hacia todas mis palabras. Odio tus días de mal humor, tus sueños pesados donde nunca te despiertas para saber como estoy, tus mensajes que nunca me llegan; odio tus labios que escupen mentiras todo el tiempo, tus ojos, los cuales me miran y me ciegan, me ponen idiota. Odio tus caricias, llenas de lastima, odio tus brazos rodeándome, que parecen estacas que clavas contra mi. Odio tus malas costumbres, tu rutina, tu alejamiento. Te odio, porque haberte amado una vez, me trae dolor. Te odio, porque si no te hubiera conocido nunca, jamás tendría que vivir con este peso todos los días, y porque todo lo que haga, me hace pensar en vos. 
Me cuesta todavía mirar tu foto pegada en el ropero, me es difícil mirarte a la cara, porque me provoca una lagrima cada vez que te veo sonreír en esa foto. Al igual que caminar hacia la cocina y no encontrarte ahí, sentarme en el vestíbulo y sentir que faltas, que te fuiste, eso me mata. Y cada vez que respiro es una rutina que me atormenta. Me sometes a la tortura, cada vez que me miras y no me dices nada, me tienes en tus manos cada vez que te acercas, y si te vas, te cuento, que me muero por verte regresar.
Cada paso que dé, cada camino que recorreré y todas esas noches de falta de sueño, estaré pensándote. En mi cabeza todavía estas como una marca, aquella cicatriz que no se borra jamás; estarás como el recuerdo mas profundo tatuado en mi piel, y el dolor mas intenso que alguien puede llegar a conocer. Me hace daño, tanta distancia de tus brazos es como vivir muriendo cada día al despertarse, vivir para fingir una sonrisa al mundo, pretender estar bien y levantarse sin tener que ordenar todas las lagrimas derramadas.. no sé que sentido tiene, no encuentro una razón para que esta separación me haga bien.
Ya pasamos diecinueve días separados, y las ganas de encontrarte en mi camino me sobran. Quisiera saber si paso por tu mente en algún momento, porque tu pasas por la mía todo el tiempo, y quisiera saber si me has estados buscando, tal vez lo has hecho y no me has encontrado.. o tal vez, no quiero creer que esto es un simple rechazo, uno de esos que dicen adiós para siempre.
El comienzo de nuestra separación, fue lo que me hizo pensar, en lo poco que queda de mi, sin vos.
Agustina.